Una corona de misioneros
Este año la fiesta de la Virgen de los desamparados la celebramos el domingo 14 de mayo. Y, al mismo tiempo, celebramos aquello que da sentido a la vida de la Iglesia: la misión de Cristo a través de nuestros misioneros valencianos.
Se trata, pues, de la Jornada deValencia Misionera, que es la jornada que la Archidiócesis de Valencia ofrece por sus misioneros diocesanos. Con ello, se nos pide que desde nuestras parroquias apoyemos la acción de los misioneros, encargados de transmitir la Buena Nueva de Dios y de velar por la dignidad de nuestros hermanos en todo el mundo. Nuestra Iglesia Valencia cumple con su misión Ad Gentes en nuestros misioneros, con su respuesta a la llamada que Cristo nos hace y que da sentido a la vida de la Iglesia: “Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda la creación” (Mc 16, 15).
En esta ocasión, la Campaña de Valencia Misionera tiene por lema “Una corona de misioneros” y continúa “La Virgen, con la Iglesia en Valencia, sostiene la misión”.
170 misioneras y misioneros valencianos se encuentran hoy llevando el Evangelio por todo el mundo. 18 de los cuales son los misioneros diocesanos, sacerdotes, que nuestra Archidiócesis de Valencia tiene repartidos por África y, principalmente, Sudamérica.
¿Por qué compartimos ambas celebraciones el mismo día?
Nuestra patrona, la Virgen de los desamparados, Madre de Dios y de los miembros del cuerpo de Cristo, la Iglesia, es Reina de las Misiones porque fue la primera misionera, aún antes que el
mismo Cristo, al llevarlo en su seno y darlo a conocer al mundo. Fue ella la que acogió con fe la Buena Nueva de la salvación, transformándola en anuncio y dio a todos los hombres la mejor directiva espiritual: “Haced lo que (Jesús) os diga” (Jn2,5).
En su advocación de Madre de los Desamparados, también vela por los misioneros, muchas veces “desamparados” ante las grandes necesidades a las que tienen que hacer frente para seguir siendo Buena Nueva allá donde están, donde Cristo les envía.
En este centenario de su Coronación Canónica, pedimos su intercesión, especialmente por los
misioneros valencianos.
¿Cómo podemos colaborar?
No existe una única forma de colaborar con la misión y los misioneros, pero sí tienes tres posibilidades a tu alcance.
Cooperación Espiritual. Por medio de la oración, los fieles colaboramos al rezar por los misioneros y las vocaciones misioneras. La oración es el arma más poderosa que tenemos para que la Iglesia desarrolle su tarea primordial del anuncio de Cristo. ¡Únete y reza por las misiones!
Cooperación Personal. Es la entrega total que realizan los misioneros. A estos, se une nuestra necesaria labor de animación y sensibilización a la sociedad aquí, dando a conocer la urgente labor que la Iglesia realiza en todo el mundo y animando a colaborar en ella.
Cooperación material. Compartir lo que tenemos es un compromiso de todo cristiano. Muchos hermanos de todo el mundo necesitan nuestra ayuda. La evangelización y la consecución de proyectos que permiten el funcionamiento y desarrollo de los territorios de misión dependen de nosotros. La colecta es imperada y las aportaciones realizadas en las parroquias se entregan en el arzobispado.